Sí, vale, Peggy Sue’s es un local súper chulo, muy bien decorado y ambientado en los años 50 americanos. Gramolas en las que puedes seleccionar las canciones que ambientan el sitio, los típicos sofás y mesas, neones, y comida que suena para chuparse los dedos.
Pero luego resulta que las gramolas nunca funcionan, como vayas con cuatro personas más lo llevas claro para tener una buena mesa, y los precios son carísimos para lo que te ponen. De ahí el título, si pusieran los precios de los años 50 se corresponderían muchísimo mejor.
Las hamburguesas ya son caras de por sí, la más barata es la ‘Peggy Sue’ por 6,35€ (carne, cebolla, salsa de pepinillo dulce, kepchut y mostaza). Lo más gracioso es que si quieres algún “extra” (queso, bacon, lechuga, tomate, cebolla…) son 50 céntimos por cada ingrediente, con huevo 1€ y, creedme, es casi como si no lo hubieras pedido. ¡Ah! No, no las ponen con patatas (o a mí me las robaron por el camino, nunca se sabe).
De las pizzas he probado la llamada ‘Marilyn Monroe’ por 4,95€ (nata, mozzarela, cheddar, carne, pepperoni y orégano) y fue un poco…lastimoso. Donde dice en la carta que el tamaño es individual deberían añadir “además, la masa es papel de fumar y los ingredientes que ponemos los cuentas con los dedos de una mano”).
En cuanto a los postres, es leer los nombres y ya se te cae la baba. Sin embargo, nunca he tenido ocasión de probarlos. En la barra suelen tener el típico recipiente de cristal que te deja ver las tartas y no tienen mala pinta, pero no diré más.
Por eso, me paséa la carta de sándwiches y la cosa remontó. La última vez que estuve pedí el ‘Club Sandwich’ por 5,95€ (pollo a la parrilla, queso emmental, huevo, jamón york, lechuga, tomate, salsa de curry, pan tostado y acompañado de ensalada de col). Suena genial y sí, estaba riquísimo. De tamaño, pues 2 pisos y medida estándar de pan bimbo, sin milagros.
Y los que nunca, nunca, nunca le han fallado a esta glotona han sido los batidos. Por 3,95€ los tienes de fresas, vainilla, chocolate y cookies & cream, siendo este último mi favorito porque viene con pedacitos de galleta y sabe a gloria. Las jarras en que los sirven están muy bien de cantidad también. ¡Por 50 céntimos te lo sirven con nata! Y sí merece la pena pedirlo.
En fin, para mí Peggy Sue’s es un restaurante al que ir a tomarse un batido muy de vez en cuando o para enseñárselo a alguien que no lo conozca si le va el estilo años 50, y probar suerte en las gramolas para escuchar a Elvis de fondo (digo yo que algún día las arreglarán). Pero nada más.
Aquí os dejo su web http://www.peggysues.es/?ini=1 más los restaurantes en Madrid.
Recordad que os hablo de los situados en la capital. En concreto los de Retiro y Conde Duque, pero hay muchos más que podéis consultar aquí.
¡Llamad para reservar si vais en fin de semana!
Un mordisquito cincuentero de La Glotona.
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2 comentarios
Curioso! Yo el otro día pedí a domicilio en Peggy Sue (el de Sarrià, Barcelona) y me pareció todo de brutal calidad y precio correcto. No se si es que Barcelona está más cara y ya estoy acostumbrada! JAjaja! La calidad de la carne buenísima, mucho mejor que Hard Rock Café o Foster’s Holliwood (por nombrar un par del estilo americano), las patatas (sí, tienes q pedirlas aparte) están increíbles, los fingers de pollo los mejores q he probado nunca en un sitio así y además trajeron un montón de salsas y llegó todo en perfecto estado (si pides Foster’s a domicilio llega todo frío y asquerosito)
No he probado los postres y los batidos aun, pero te haré caso 😀
Bueno, es mi opinión de varias experiencias que he tenido…Del reparto a domicilio no puedo hablar pero por lo que dices parece que el Peggy Sue’s de Sarrià, Barcelona, funciona mucho mejor (y no sabes cuánto lo envidio) 🙂
¡Prueba los batidos, en serio! ¡Son fantásticos!
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