Tenía muchas ganas de visitar esta tetería/cafetería/lugar encantador donde los haya y contarlo. Y por fin está aquí el post sobre Mamá Framboise para hacer sus bocas agua. Pasen y vean.
-
-
Cappuccino decorado, Mamá Framboise
-
-
Mamá Framboise, mesas
-
-
Mamá Framboise, carta
-
-
Barra Mamá Framboise
-
-
Rinconcito en Barra Mamá Framboise
-
-
Mamá Framboise
-
-
Cappuccino decorado 2, Mamá Framboise
-
-
Croissant de avellana, Mamá Framboise
-
-
Tarta de chocolate, Mamá Framboise
-
-
Croissant de avellana, Mamá Framboise
La Glotona pidió cappuccino (2,05€) y croissant de avellana (1,50€). No me esperaba aquello: un taza que más bien era un tazón de cappuccino, con su espumita y en ella, un precioso dibujo que te disuadía de añadir azúcar y romperlo. El croissant me conquistó al primer bocado. Esponjoso y con la crema de avellanas de principio a fin, que le daba aún más sabor. ¡Cuánta dulzura!
Una de mis acompañantes se decidió por la tarta de chocolate (3€ porción individual) y un zumo de naranja natural (2,55€). La tarta, aunque pequeñita, estaba deliciosa.
Las opciones de Mamá Framboise no acaban ahí. Hay muchos más croissant rellenos, bizcochos, galletas, macarons y crepres. Para los más salados, ensaladas, quiches, sandwiches…Para beber hay batidos, tés, cafés, zumos, cervezas, vinos…Desde aquí podéis consultar la CARTA y ver todo.
El local es p-r-e-c-i-o-s-o. Las paredes con papel pintado, las cómodas y la sencilla vajilla le dan un toque muy hogareño. Las sillas dispares y con aire retro le hacen vintage. Cuando estás a medio bocado te das cuenta de que no estás en el salón de casa (a mí me faltaban las pantuflas, la verdad).
Al servicio solo le voy a poner una pega, porque fueron amables y atentos, pero cuando empieza a llegar mucha gente y todas las mesas están ocupadas, se supone que hay que apuntarse para que los camareros coloquen a los clientes por órden. Pues no. Van un poco a su libre albedrío. Nosotras éramos 3 y nos colaron por delante a un grupo de señoras que llegaron mucho después. Un poco desorganizado.
El ambiente era estupendo. A pesar de que tuvimos que esperar un poquito y que estaba hasta la bandera, por alguna razón, se estaba fenomenal, sin sensación de agobio ni tener que hablar a gritos para oírnos. Otro punto a favor de esta tetería es que puedes comprar cualquiera de sus productos para llevar, como una pastelería más. Tengo decidido que voy a volver para probar los macarons.
Así que, Mamá Framboise pasa a ser uno de mis lugares “de fondo de armario”, por así decirlo. Un lugar bonito, a buen precio, donde estar a gusto y haciendo disfrutar al paladar.
Mamá Framboise se encuentra situado en la Calle Fernando VI, 23. Metro Chueca, Colón o Recoletos en cercanías. 913914364 Mapa aquí. Y su web pinchando por aquí.
Un mordisquito lleno de mimo de La Glotona.
¡Y recuerda que puedes seguirme por Twitter y Facebook!
Deja un comentario