Últimamente Asia me llama a voces. Y yo respondo a bocados. Literalmente, porque el nuevo restaurante en sumarse a la lista de asiáticos de La Glotona es un chino recién salido del Shanghai de los años 30: El Bund.
Se encuentra en la zona de Arturo Soria , un parte de Madrid que a duras penas conozco y por la que me muevo más bien poco. Eso es algo que debería cambiar porque este es el segundo restaurante de por allí con el que me topo y me encanta.
¿Y qué esconde El Bund? Pues un restaurante de cocina tradicional china de alucinar. Ya desde fuera te quedas impactado porque está dentro de un chalet. Al entrar, has cambiado de continente y de época. Shanghai tenía que ser así en los años 30 (pero todos esos detalles os los cuento más adelante).
Cuando cojáis la carta no os asustéis, hay muchísimos -creedme, muchísimos- platos para elegir. Se debe a que han querido reunir lo mejor de la cocina china en un restaurante y hay tantas opciones que era difícil dejar cosas fuera. De hecho, tienen chefs especializados en los sabores de Pekín, Shanghai, Hangzhou, Sichuán, platos de la cocina cantonesa y muchas especialidades tradicionales. Además, cada día elaboran pasta fresca y dimsum hechos a mano.
Tapita de medusa, ensalada de brotes y berenjena (de izq. a der.) De entre los platos de su carta pude probar una buena selección. Comenzamos con una “tapas” que no dejaron indiferente a nadie. Sobre todo la de medusa . Sí, sí. Habéis leído bien: comí medusa. Con miedo y un poco de reparo pero lo hice. No está mal ni desagrada en boca…es un poco gelatinosa pero con un punto crujiente. Y el sabor…pues no tengo ni idea de con qué compararlo, sinceramente. ¿Que si os animo a probarla? Bueno, si sois unos foodies alocados, sí.
Las demás tapas ya fueron más normales: una ensaladita de Soja verde con brotes de bambú y también Berenjena sichuanesa , con el especiado picante de Sichuán. Ésta última triunfó entre los comensales. Deliciosa.
Después tomamos Dimsum de carne a la plancha . Espectaculares. Me hubiera comido una ración yo solita. La masa estupenda y el relleno muy rico.
Dimsum de carne a la plancha El siguiente plato es obligatorio pedirlo: pato a la pekinesa . Estaréis pensando “buah! Qué topicazo de un chino”. Pues alucinamos todos los comensales con él, desde su preparación hasta el último bocado. Una de las camareras colocó una mesita plegable y en ellas preparó con obleas unos rollitos rellenos del pato con verduras. El sabor era maravilloso, muy jugoso y con un toque dulce de la salsa.
Preparación del pato a la pekinesa
Rollitos de pato a la pekinesa
Después continuamos con Gambones a la Shanghainesa: hechos a la plancha con una salsa especiada tradicional de Shanghái, y servidos en una cazuela bien calentitos. También probamos la Ternera salteada, por supuesto ya troceada antes de llegar a la mesa, y el Cucurucho de pollo al sésamo, que recuerda a los nuggets de pollo pero con el toque de sésamo haciéndolos más ricos y originales.
Todo ello acompañado , como no podía ser de otro modo, por Arroz frito al estilo cantonés, es decir, salteado con gambas y verduras muy picadas.
Ternera salteada
Cucurucho de pollo
Arroz frito
Gambones
Sí, nos pusimos de lo lindo pero…¡es que estaba todo delicioso!
Sobre el restaurante, os comentaba al principio que ocupa un chalet de 3 plantas , divididas en 3 comedores grandes, y 8 reservados. Además la terraza y el pequeño jardín de la entrada, una auténtica cucada . Según pones un pie dentro, Madrid desaparece y pasas a China . La entrada es muy oscura, así que te despistas un poco pero al entrar en el salón se hace la luz. Dos de las paredes están decoradas con elegantes motivos asiáticos y las otras dos son grandes cristaleras, así que imaginaos la claridad que hay en el interior. Sillones muy cómodos, grandes mesas, flores…No falta detalle. La atención del personal es muy destacable: fueron educados, rápidos y serviciales.
El Bund se encuentra en C/ Arturo Baldasano, 22 (metro Arturo Soria, L4). Abierto L de 20:30 a 00h. M-D de 13:30 a 16:30h y de 20:30 a 00h. Tel: 91 115 18 13. WEB .
Me pilla lejos, 1 horita de metro aproximadamente pero…¡me da igual! No lo voy a olvidar fácilmente y volveré.
¡Un mordisquito de La Glotona !
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